“El que busca donde no debe, encuentra lo que no quiere”

Me llamo Matilde. Tengo 1 marido, 1 hermano y 1 madre (¿Os he contado que son los mejores del mundo?) 2 niñas, 2 suegros, 3 cuñados, 4 sobrinas, 19 primos, 20 años trabajados en Banca y 44 en total.
También tengo un montón de amigos, una familia maravillosa, cáncer de mama metastásico y un gen mutado. He sido payasa en fiestas infantiles, canguro, becaria, opositora fallida. Me gusta leer, escribir, viajar, dormir, ir de rebajas y estudiar.

Quiero que tener cáncer sea un episodio más en mi vida, no el capítulo definitivo que da sentido a toda la serie. Me considero una Paciente Impaciente porque lucho por no serlo, porque quiero saberlo todo y saberlo YA.
(¿Me va a doler?  ¿Cuánto tiempo estaré cansada? ¿Cuándo me va a crecer el pelo? ¿Por qué me duelen hasta las pestañas la semana antes de una revisión? ¿Cómo afectará este follón a mi familia?)

Que levante la mano el que no haya salido de la consulta en blanco, como si le hubieran dado la receta del Solomillo Wellington. Y claro, llegas a casa y te preguntan y tú no te acuerdas e intentas rellenar lagunas en Google y Ay…

Cuando María, Alejandro y Alfonso me dieron la oportunidad de contar en su blog todo lo que he vivido (estoy viviendo) y contrastarlo con ellos, me pareció un lujo:  Tener nuestro sitio donde comprobar de primera mano que casi todo lo que nos duele, tanto psíquica como físicamente, es NORMAL y tiene su explicación. Esa explicación que por prisas, nervios o miedo no pedimos y se queda ahí, pinchando el alma, hasta la siguiente revisión.